En "Parte del Aire" seguimos de cerca el tema de la situación en la enseñanza privada y la compleja realidad que atraviesan las instituciones educativas, los docentes y padres y alumnos en esta pandemia.
Carlos Mosso es, hasta junio de este año, presidente de la Unidad de Padres del Instituto de Enseñanza Privada Camila Rolón de Mercedes. Un colegio secundario que comenzó gracias a la iniciativa de los padres de alumnos que terminaban el ciclo primario de la escuela San José y que con esfuerzo lograron un predio propio para las instalaciones en 19 y 114.
Mosso define la actualidad que atraviesa el sector educativo privado como "una realidad cruel" además de las diferentes realidades que atraviesan cada una de las instituciones educativas de acuerdo a la recepción o no de subvención del Estado y también de la morosidad en el pago de las cuotas: "no todas están subvencionadas al cien por ciento"
A la complejidad de los grados de subvenciones se suma que "no todas las familias están bancarizadas" con lo cual el pago de cuotas por medios electrónicos se ve dificultado y además "muchos de los padres, la mayoría son monotributistas, autónomos, empleados de comercio y pocos empleados estatales" con lo cual la realidad económica de las familias también es complicada en este contexto.
En el caso de Camila Rolón, Mosso comenta que con el 50 por ciento de subvención no alcanza para costear los gastos por lo que es importante el 50 por ciento que aportan los padres con las cuotas: "las cargas sociales son altísimas" además de los gastos fijos como servicios, impuestos, luz, gas: "12 mil pesos de luz y 8 mil de gas" remarca.
Los mecanismos de financiación del decreto 332/20
Frente al des balanceo entre ingresos y egresos la realidad se torna compleja y difícil para las instituciones educativas y la posibilidad de algunos mecanismos de financiación para afrontar los gastos no parece convencer a Mosso: "no me gustaría para nada endeudar a la institución" comenta sobre la alternativa de acceder a créditos blandos del gobierno para pagar sueldos, como lo mencionara Graciela Gonzalez, referente de SADOP, en la entrevista realizada la semana pasada en "Parte del Aire".
"No es tan fácil como se dice" explica Mosso y señala que "las Pymes que lo solicitaron todavía están esperando el desembolso hace un mes"
"La cuestión es qué va a pasar con la matriculación el año que viene"
Además de la complejidad de la realidad actual, Mosso piensa, no en lo que viene después de que se levante la cuarentena este año, sino en lo que deparará el año próximo.
"Creo que la matrícula de alumnos del año 2021 se va a ver muy afectada" indica y resalta que "ninguna institución privada, salvo casos excepcionales, hemos brindado, además de las becas, planes de pago para las familias que son morosas".
El tema es arduo e involucra necesariamente las economías de las familias y la de la propia institución: "empezamos el 2020 con arrastre de 10 por ciento de morosidad" dice y agrega que ven "con preocupación" que en estos meses haya un alza muy fuerte de casos morosos en los pagos de cuotas.
"Muchos alumnos se van a quedar sin banco el año que viene" se lamenta Mossoy argumenta que "todas las instituciones tienen el derecho de admisión.El colegio puede decir que no renueva la matricula porque se debe mucho".
"El problema va a ser cómo arranca el año que viene" sostiene y ejemplifica con realidades que hoy atraviesan algunas escuelas privadas donde hay "un 70 por ciento de morosidad". Muchas instituciones privadas que integran AIEPBA, una cámara que nuclea en la Pcia de Bs As a unas 2300 escuelas.
Una "realidad cruel" remarca una y otra vez Carlos Mosso en la entrevista en "Parte del Aire" por FM Santa María.
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