Fiestas patronales, las que se celebran en estos días, son un distintivo de la vida de los pueblos donde parte de la ciudadanía se congrega en la devoción de la virgen o el santo que los protege.
Ayer, a pesar del tiempo, la procesión recorrió las calles de la ciudad con la Virgen de las Mercedes, en un paseo que se repite año tras año, buscando la bendición para todos los mercedinos.
Las celebraciones empezaron con el mes y se prolongarán hasta el próximo fin de semana incluyendo un festival floklórico en el atrio de la Catedral y una bicicleteada familiar.
Parte del Aire de esta fiesta encierra el deseo de agradecer lo recibido y por otra parte renovar ese compromiso con la Virgen María, patrona de nuestra ciudad.
Un compromiso de ligazón, de comunión que lo alto, en la espera del resguardo y el cuidado, donde se unen el pasado, el presente y el futuro de un lugar en el que muchos han decidido hechar raices.
Ayer, a pesar del tiempo, la procesión recorrió las calles de la ciudad con la Virgen de las Mercedes, en un paseo que se repite año tras año, buscando la bendición para todos los mercedinos.
Las celebraciones empezaron con el mes y se prolongarán hasta el próximo fin de semana incluyendo un festival floklórico en el atrio de la Catedral y una bicicleteada familiar.
Parte del Aire de esta fiesta encierra el deseo de agradecer lo recibido y por otra parte renovar ese compromiso con la Virgen María, patrona de nuestra ciudad.
Un compromiso de ligazón, de comunión que lo alto, en la espera del resguardo y el cuidado, donde se unen el pasado, el presente y el futuro de un lugar en el que muchos han decidido hechar raices.
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