Las vacaciones están a pleno y a las playas y
sierras, los lugares turísticos tradicionales, se suman otros destinos nuevos y
con modalidades diferentes como las mini vacaciones.
En este tiempo donde el ocio se centra en la
vida cotidiana, muchos optan por el cambio de paisajes, mientras otros se
conforman con un cambio en la rutina pero en sus hogares.
Las posibilidades de vacacionar depende del
bolsillo de cada uno y la costumbre data del siglo pasado como beneficio para
las clases trabajadoras en el gobierno de Mussolini.
Parte del Aire de estas vacaciones nos ponen,
muchas veces, frente al placer del dolce far niente, aunque conseguir
alojamiento y distracción sea un trabajo previo de investigación.
Para aquellos que disfrutan de este beneficio,
el mejor de los tiempos, y para aquellos que aún continuan en sus trabajos, la
esperanza de que pronto les tocará el momento: felices vacaciones.
Comentarios