No se le pueden pedir peras al olmo es una
frase frecuentemente utilizada para decir: no esperes nada de esto, o de esta
persona.
Sin embargo hay gente que apuesta, todos los días
en su tarea cotidiana, a revertir esa frase y a sacar lo mejor de cada uno de
los jóvenes que pasan por las aulas de los colegios.
Hoy es el día del profesor y también del
psicopedagogo, y uno no puede dejar de recordar a aquellas personas que “cincelaron”
la educación y modelaron conductas frente a pizarrones.
Parte del Aire de la tarea cotidiana de
profesores es, no solo transmitir conocimiento, sino hacerlo compartiendo los
sentimientos y acompañando a los jóvenes en su camino.
Varias teorías se abocan sobre la enseñanza sin
embargo, sin la presencia, el cuerpo a cuerpo de los profesores, la tarea se
diluye en los papeles: felíz día!
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