No obstante la existencia de la libertad sindical, la posibilidad de conformar una entidad de base con representación, permite la garantía de legitimidad de los reclamos.
Las voces se levantan y cada parte tiene sus motivos y razones pero la libertad de elección es un punto que no debería ser cuestionado: hay otros caminos para llegar a la unidad sindical.
Parte del Aire de las luchas gremiales sostuvieron el derecho a la elección, a la representación, buscando la expresión más legítima de los trabajadores sin intermediarios, o al menos esa fue la intensión.
Que un acto eleccionario de una central trabajadora sea cuestionada por otra, no habla de una buena convivencia y retrasa la marcha hacia la unidad de los trabajadores en esta Argentina.
Comentarios