El próximo 13 de junio se estaría tratando el proyecto de ley sobre paritarias municipales en el recinto de la cámara baja del Congreso Nacional y varias son las posiciones en torno de este tema que inquieta a funcionarios provinciales y alegra a los trabajadores municipales.
Fe.Si.Mu.Bo es el sindicato de empleados municipales de la provincia de Buenos Aires que viene luchando por la derogación de la ley 11.757 sancionada en la época de Duhalde como gobernador de Buenos Aires y que, como ley marco de la actividad municipal, quita el derecho de los trabajadores municipales de tener sus propias paritarias salariales.
La controvertida ley de Paritarias Municipales, esa que la mayoría de los intendentes rechaza y el sciolismo no aceptó en los términos del proyecto original, se ha metido como un ariete más en la puja entre Nación y Provincia. Y esta semana se juega una mano clave en pos de sacar la norma a partir de un nuevo borrador, que aplica modificaciones al texto del proyecto D-219 del diputado Jorge Mancini, que no pudo consensuarse a fines de mayo, (informa La Tecla)
A mediados del mes pasado los municipales se manifestaron en contra de la ley vigente y hace días participaron de un Congreso Internacional en Suiza manifestando esta posición en el ámbito exterior.
Fue la presidenta Cristina Fernández quien dio las directivas para terminar con una vieja lucha. El fundamento principal es que en un gobierno en el que las paritarias fueron una bandera dentro de los logros conseguidos, no pueden faltar en la base de la pirámide de los trabajadores estatales. Aunque los intendentes pataleen
Justamente, para evitar ese pataleo, la normativa compromete al Ejecutivo bonaerense, y lo lleva al terreno de garantizar el piso que en una primera negociación acordará con los gremios. A la vez introduce en la negociación los recursos de la Provincia, con la siguiente lógica expresada desde la Casa Rosada: “Si Scioli nos pide a nosotros para afrontar sus salarios, que los intendentes recurran a Scioli para garantizar los suyos”.
En el intento de destrabar las negociaciones en Diputados, y consensuar el texto con los gremios, se tratará de no alterar el artículo 2, que refiere a dos niveles de negociación: el primero, “a nivel macro”, que será provincial y fijará un piso; y el segundo, a “nival local”, donde se cerrará el salario a partir de aquel piso. Se trabaja, entonces, sobre los siguientes puntos:
* En el artículo 3, donde el proyecto original preveía 8 representantes de los intendentes (4 por el Conurbano y 4 por el interior) para la negociación provincial, el nuevo texto reza que se “conformará con intendentes y presidentes de los Concejos Deliberantes de las 8 secciones electorales”. No fija un límite de mandatarios, y además agrega dos representantes por el Ejecutivo (en el original había uno), con la intención de incorporar al ministerio de Economía.
* En el artículo 4, de la representación de los trabajadores, se establecía que “las entidades de segundo grado podrán participar en el nivel local de negociación”. Esa posibilidad de que el gremio madre del sindicato municipal se siente a la mesa con el intendente, fue retirada.
También hubo modificaciones en el artículo 6, que establece las competencias de las negociaciones provincial y local; y en la entrada de vigencia de la norma y los alcances en la situación de disponibilidad.
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