En un año netamente electoral las etapas de
aproximación a la fecha del comicio se cierran despejando cada vez más la
cancha señalando los participantes.
Ayer cerró la inscripción a los partidos y
alianzas que participaran de las PASO y de ahí directamente a las elecciones
legislativas.
Segunda oportunidad de confrontar en una elección
que se vive en dos etapas: las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias,
especie de preámbulo a las legislativas de octubre.
La impresión que dejó esta instancia previa fue
que luego del voto por el corazón y la camiseta, de acuerdo a los resultados y
guarismos, las elecciones posteriores agudizan el cálculo despejando las
especulaciones.
Esta anticipación de resultados llevó a cierta
polarización en la votación, filtrando las alternativas y sintetizando todo a
dos propuestas contrapuestas.
Parte del Aire de las elecciones por etapas
pareciera encaminar el voto y el sistema político a la conformación de dos
bloques, resumiendo todo a dos alternativas.
En un contexto distinto y con el mandato de
elegir a los representantes del pueblo en el poder legislativo, las cartas
comienzan a barajarse para la siguiente mano.
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