Si hay un
juego que grafica situaciones donde la intriga es parte fundamental del
desarrollo de los acontecimientos, ese es el juego del póker.
Porque en
el poker, más allá de las cartas que cada jugador tenga en sus manos, el
condimento principal es poder saber qué cartas tiene el contrincante.
Obviamente
que si la mano es muy beneficiosa no hay preocupación en ganar el juego aunque,
también hay que saber ocultarlo para sacar más rédito en la apuesta.
Parte del
Aire de estos tiempos, muchos están a la expectativa de cómo quedará repartida la
torta del poder en la mesa tras este juego de tensiones que se definen el 22.
Con buenas
o malas cartas, los jugadores están midiéndose, palpando los gestos de cada
uno, esperando el error mínimo para proyectar la jugada y poder ganar.
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