La adrenalina se contiene hasta el último minuto cuando el partido se define a penales y los nervios se alteran mucho más cuando en los noventa minutos se dominó la pelota y hubo varias posibilidades de gol.
Pero el fútbol como las noticias internacionales son tan impredecibles que hasta en un mismo día, por el viernes pasado, el mundo se conmocionó tras cinco atentados que arrojaron cerca de doscientos muertos.
El tiempo avanza y a las pálidas noticias sobre atentados terroristas y a pesar de la ansiedad futbolística hay buenas noticias como la visita del Santo Padre a Bolivia en este próximo mes de julio.
Parte del Aire de esta vorágine informativa que muchas veces no nos dá tiempo ni a respirar pareciera ser un proceso irreversible de la tecnología que cada día nos acorrala con sus pantallas led y micro chips.
La vida muchas veces se toma tiempo de descuento y hay finales que se definen por penales, agregándole esperanza a este mundo alocado, como el agrónomo argentino secuestrado en Nigeria que invocando a Messi se salvó.
El tiempo avanza y a las pálidas noticias sobre atentados terroristas y a pesar de la ansiedad futbolística hay buenas noticias como la visita del Santo Padre a Bolivia en este próximo mes de julio.
Parte del Aire de esta vorágine informativa que muchas veces no nos dá tiempo ni a respirar pareciera ser un proceso irreversible de la tecnología que cada día nos acorrala con sus pantallas led y micro chips.
La vida muchas veces se toma tiempo de descuento y hay finales que se definen por penales, agregándole esperanza a este mundo alocado, como el agrónomo argentino secuestrado en Nigeria que invocando a Messi se salvó.
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