La falta de respuestas ante la demanda de producir cambios en el Impuesto a las Ganancias (cuarta categoría) profundizó el conflicto anunciado por la Federación de Transportes y derivó en la construcción de un Paro Nacional.
La CGT de Moyano, que inicialmente había rechazado sumarse a la medida, finalmente lo hizo. Nuestra CTA-Autónoma venía planteando la necesidad de generalizar la medida del 31, como se expresó en la concentración el 17/3 en el Ministerio de Trabajo. El jueves 26, la mesa nacional de la CTA anunció la convocatoria al paro, por la anulación del impuesto al salario y ampliando el reclamo al 82 % móvil para los jubilados, el pedido de la convocatoria al Consejo del Salario para llevar el mínimo a $ 12.000, paritarias libres y democráticas con un piso de 40 % de aumento y la derogación de la ley antiterrorista.
CICOP convocó a asambleas, consultas y una urgente reunión de CDP ampliado con el fin de discutir la decisión de nuestro gremio frente al paro. Tomando como referencia las asambleas y relevamientos que pudieron organizarse pese al poco tiempo disponible, el CDP de CICOP decidió adherir y convocar al paro del 31/3.
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