La noticia pasó sin pena ni gloria. Apenas
algunos medios la reflejaron y otros la tocaron de soslayo: cerca de 17 mil
personas en la ciudad de Buenos Aires se encuentran en situación de calle.
El eufemismo sirve para no hacer más cruda la
realidad: 17 mil personas que viven en la calle, que duermen en la calle, sin
techo ni hogar. ¿Cuántas así viven en nuestra ciudad?
Se aproximan las navidades y es una fecha
significativa para la gran mayoría de nosotros: tiempo de introspección, de recogimiento
y de reconciliación.
Esa noche, rodeado de los seres queridos,
aquellos que aún los conservan, a la hora del brindis, sería bueno pedir por la
situación de todos aquellos desamparados y agradecer por lo que nos toca.
El agradecimiento es una actitud que
inmediatamente se valora, se reconoce. Ser agradecido no es una postura, es una
actitud, es algo que se aprende pero que también nace desde lo más íntimo de
cada uno.
En estas navidades, que Parte del Aire de esa
celebración contenga ese espíritu de
humildad y sinceramiento que guarda el ser agradecido.
Y en el momento preciso del brindis, mirando a
los ojos a cada uno que nos rodea, regalarles lo mejor que tenemos: nuestra
presencia, nuestro afecto y nuestro agradecimiento.
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